La 
Barceloneta aunque hoy en día, 
especialmente en verano, sea un lugar tomado por el turismo más pegajoso
 y playero, antaño fue un lugar plagado de atrevidos aventureros, 
personajes de pasado turbio y humildes hombres de mar, algo que se 
explica por su evocador pasado marinero. Aún así se mantiene por ser uno de los barrios barceloneses con mas misterio, y hoy os presento uno de ellos.
Se trata de una 
extraña mano, esculpida en piedra en la esquina de una de las viviendas 
levantadas por militares borbónicos en el siglo XVIII.
Hay quien la relaciona con el satanismo, la magia negra y otras 
singulares explicaciones esotéricas, pero la teoría mas valida es la que
 habla de la relación con la masonería muy presente en la zona en 
aquellos tiempos. La mano es ya de por si un símbolo masónico que 
representa la fraternidad, uno sus ejes, mientras que los propios 
triángulos  son profusamente utilizados en la simbología masónica que 
los utiliza con significados varios: representante de los poderes de la 
tierra, del Gran Arquitecto del Universo, del propio lema masón o de las
 pirámides egipcias utilizadas por la masonería como símbolo de la 
búsqueda de la divinidad.
Es posible que la mano sirviera para indicar el lugar de una logia 
masona, o que indicara de un modo más o menos velado, que esa casa era 
propiedad de un masón. No en vano, La Barceloneta fue construida por 
militares que servían a las órdenes de Felipe V, muchos de los cuales 
tenían relaciones más o menos reconocidas con la Francmasonería.
La mano no tiene 
un origen ni uso reconocido al no estar documentado, pero todo parece 
indicar que era una señal de circulación de la época.
 
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